sábado, 24 de abril de 2021

Que me lo expliquen que no lo entiendo.

 


Que medios informativos, profesionales independientes, o periodistas "imparciales" con medio dedo de frente, salgan en tromba a mentir descaradamente a los ciudadanos es preocupante.

Ayer, 23 de abril del 2021, en un supuesto debate, -con moderadora de parte-, se produjo un episodio a cuenta de unas convenientes amenazas, a una de las partes…

Y ¡Oh! Casualidad, como el discurso de la gestión no da pa' más, la izquierda en comandita, -presentadora incluida-, decidieron, que palabras que todos hemos oído, las tenían que tergiversar.

Hace mucho ya, que los que dicen representarnos nos toman el pelo, y nos tratan como a gilipollas, lo que no entiendo, es que, personas que supuestamente posen conocimientos suficientes para saber lo que está bien, o lo que está mal, se plieguen al mandato de ideólogos de mierda y contribuyan a sembrar el odio en la sociedad.

Si hay algo que odio, es que me tomen por gilipollas y encima les tenga que pagar.

Ayer, un tal señor Pablo.

El mismo Pablo que llamó a las barricadas en noche electoral.

El mismo Pablo que apoyó las algaradas, la violencia, la quema de contenedores, vandalismo y atracos a tiendas en las manifestaciones a favor de Pablo Hasél.

El mismo Pablo, que llamaba a salir por la noche a cazar "fachas".

El mismo Pablo, que en anteriores elecciones se hizo víctima de un complot, aduciendo ser objeto del robo de una tarjeta de teléfono con datos privados, que al final resultó en su poder.

El mismo Pablo, que se inventó un delito de acoso sexual a su propio abogado para despedirle sin indemnización por justa causa.

El mismo Pablo, que apoya sátrapas, por que le financian, y porque le da la gana.

El mismo Pablo, del paripé, que viaja en coche oficial, pero antes de llegar, a los cien metros coge el taxi para no quedar mal.

El mismo Pablo, que con mucha pompa se hizo cargo de las residencias,  y mientras morían ancianos a mazo, él seguía viendo Netflix sin soltar el mando.

Ese mismo Pablo, mentiroso compulsivo, mala persona, incompetente y vago, ayer hizo teatro.

Y lo hizo, porque no sabía qué hacer, porque después de estar en el poder, no se le ha visto labor, aparte de comentar series de Netflix en las redes claro.

La manera que encontró ese Pablo para el enfrentamiento, como no, fue como siempre, tergiversando, exigiendo de antemano, que para seguir sentado a la mesa del debate, un oponente político se desdijera de algo que no había dicho.

Eso no sucedió, el oponente político, en este caso una mujer con los ovarios en su sitio, no aceptó pulpo como animal de compañía y le espetó: Vete valiente, vete que no quiero verte…

Y Pablo, ese pablo, que no tiene por costumbre verse replicado, y menos por una mujer, huyó raudo y veloz, al no estar la presidenta del parlamento para callar a la de Vox.

Lo esperpéntico, lo que a mí me asombra, es que en este país "cabal" gentes que parecen tener dos dedos de frente le compren el discurso al chaval, y haya idiotas, que se pongan de su lado, tales como Edmundo Bal, el cual debería de saber, que la táctica de demonización utilizada por Ciudadanos les ha resultado fatal.

Criminalizar un partido demócrata como Vox, cuando el gobierno y sus socios se han mostrado sectarios e incompetentes en todos los campos, no hace más que reafirmar a sus votantes en la convicción de que para enderezar el rumbo del país, Vox es de imperiosa necesidad.

Lo que tenemos hoy no es más que un sistema feudal, donde hay unos señores, los más, que trabajan y pagan impuestos, y hay otros, que se creen con derecho de pernada, y que no están dispuestos a ceder el sillón en buena lid.

Si queréis llevar cuernos, aunque sean virtuales, mantenerlos ahí...

Pero no digáis que no os avisé.

 

By Luis Ángel Jul López

domingo, 11 de abril de 2021

Tiempos de elecciones…

 


Tiempos de legitimar estafadores y ladrones, tiempos de consignas y falsas promesas, tiempos de redención, tiempos de volver a los orígenes…

¡No!

¿Qué digo?

A los orígenes no, tiempos de volver, sí, pero al discurso original, al pecado capital de la mentira primera, a la estafa primigenia.

Asistimos, no sin cierto asombro, -por lo menos por mi parte-, como los mismos de siempre se posicionan en la primera fila de la parrilla de salida, sin que nadie ose dentro de sus partidos disputarles la posición. Y vuelven a la carga con viejas consignas, que suenan más o menos así: Que viene el loooboooo, asustando a la gente, y aprovechando la mascarilla, pa' que no se les vean los dientes.

Mienten con descaro, justifican lo robado, las violaciones de menores tuteladas por el estado, las millonarias, e inexplicables subvenciones a cargo del erario.

Siguen con descaro escondiendo muertos dentro del armario, que al ser tantos, ya ni siquiera caben en un estadio, y los esconden, con la complicidad de muchos ciudadanos, que más de cien mil almas, oigan, eso no es moco de pavo, ni cabe en diez mil armarios.

Llega a tanto la desfachatez, que hasta presumen de sus "logros", transformando la propia incompetencia en éxito rotundo, nos tratan como disminuidos psíquicos de corta edad.

Que los muertos podrían haber sido cuatrocientos mil más… Dice el ejecutivo sin mover una pestaña, que la culpa no es nuestra, es de las comunidades autónomas de España…

Al olvido relegan las manifestaciones, los partidos de fútbol, la falta de mascarillas y respiradores, los EPIS fabricados con bolsas de basura, a nuestros mayores, los palos de ciego, los errores, los horrores, y los miles de muertos.

Es menester en los tiempos que corren, lograr la joya de la corona, que mor de las trilerías desde la Moncloa, se ha visto obligada a poner en juego Díaz Ayuso. Es tiempo pues de adaptar el discurso, de ejercer el fascismo más crudo, y desde el propio gobierno llamar a las barricadas.

Antifascistas de España, Iglesias Turrión llama, muniros de piedras, palos, cadenas, botas buenas pa' patear guardias, y, alguna que otra pata de cabra.

¡Muy importante!

No olvidar llevar capucha y máscara, que hay un mitin del rival, y hoy vamos a practicar nuestra democracia…

Mientras tanto, el rival, y toda la ciudad se preguntan: ¿Dónde está Marlaska? ¿Dónde está Sánchez? ¿Dónde el gobierno de España?

Algunas voces tímidas a lo lejos se dejan oír…

En Doñana.

 

By: Luis Ángel Jul López.


¿Hay alguien ahí?

  A pesar del estruendo, del ruido de escombros cayendo, de lo absurdo de la demolición, del volado, y la violación de las normas, a pes...