lunes, 15 de junio de 2020

El presidente rectifica…

           


 

A su propia conveniencia y para mantener el sillón monclovita, y ya vamos porrr… El mil un cambio de parecer.
 
Lo he dicho en mi último artículo, y para más énfasis, era la frase que a este daba titulo, para el que no lo haya leído, aquí la dejo: El precio de la incompetencia.
 
Dice ahora el presidente, que los presupuestos no valen, que hay que empezar todo de cero, manda llamar entonces a la ministra del ramo, María Jesús Montero, que es, la que... "Sic" sabe de números en este gobierno.
 
Echa la culpa el felón, al virus que vino del frío, de detrás del telón de plástico baratero, y a pesar de venir de un país de similar ideología, a la de este gobierno, ha resultado ser un virus facha, cabrón con mala leche y traicionero.
 
Que vino camuflado y sin avisar. -Aunque desde Wuhan más avisos no podían dar.- El caso es, que después de tres meses de aplausos y cantares, creciente afición al vino, y a nuestros muertos hacer poco caso, se aproxima el día de pagar la factura a los vivos…
 
El precio de la incompetencia y de la negligencia, por interés personal del presidente y la recua de pollinos que le jalean, se me antoja va a ser caro de pagar, y de muy mala digestión.
 
Aunque el bravo español otras cosas no, pero el estomago lo tiene como el acero, si no, no se entiende la pasividad reinante, y mucho menos algunas encuestas.
 
Rectifica el presidente, que lleva dos años en el sillón, gobernando por decreto e incapaz de sacar unas cuentas, ni de llegar a acuerdos en el parlamento.
 
Aunque él presuma de lo contrario y saque pecho.
 
Los acuerdos se entienden como tal, cuando ambas partes ceden en sus pretensiones, cuando una de las partes, no solo no cede, si no que además exige más competencias y caudales, y el otro da todo lo que le piden por mantenerse en el puesto, eso no son acuerdos, eso es compra de tiempo pa' seguir en el sillón.

De esa compra de tiempo con caudales ajenos, se genera desigualdad, rabia, impotencia y odios, algo que al parecer se le da muy bien este gobierno,
 
Y yo, desde mi atalaya, por mucho que busque, por mucho que hurgue y escudriñe, no veo rectificación.
 
Ni una coma, ni un punto de inflexión, no hay cambio de parecer, sigue la hoja de ruta marcada así se congele el Sol, su único objetivo:
 
Un mes más, una semana más, un día, horas o minutos, permanecer en el sillón, es el aire que respira, es la vida de Pedro Sánchez Castejón.
 

By: Luis Ángel Jul López.


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