Desatontuciar...

...Con la vara del membrillo, o con la estaca de pino... No, esa no es la solución, aunque tengo que reconocer que si por ganas fuera... 

Todos tenemos nuestros sentimientos, todos tenemos nuestras razones, pero... Ay amigos, contra el corazón no hay razón que valga, los males del corazón tan solo el tiempo los cura, amén de un desengaño o una buena cornamenta.

Y aun así, bien es sabido por todos, que más de un cornudo seguirá fiel al objeto de su pasión. Por lo tanto señores, lo sucedido ayer en Cataluña no debe  de cogernos por sorpresa.

Confieso que por mi parte esperaba mejores resultados para los partidos constitucionalistas, menos mal que estaban Ciudadanos e Inés Arrimadas remando contra la corriente, de momento y a mi parecer, el único partido en España que está manteniendo una línea de coherencia entre lo dicho y lo echo... Bueno, perdón, no el único, también los independentistas son coherentes con su mensaje, aunque no nos guste justo es reconocerlo.

¿Qué hacer entonces?

Entiendo yo que habría que desatontuciar a más de dos millones de catalanes, y algún que otro "castellano,"  labor que se me antoja harto difícil  y a largo plazo, quizás una buena medida sería copiar la ley de claridad canadiense, acompañada de una reforma de la constitución, donde quedase meridianamente claro las líneas rojas en cuanto a competencias de cada representante de comunidad autónoma. 

También nos vendría bien recuperar para el estado central competencias tales como educación, sanidad y seguridad, fuera policías autonómicas.

Otra de las labores para enderezar los entuertos de estos treinta y cinco años de "sic" democracia, sería, en las próximas elecciones potenciar a Ciudadanos,  resucitar partidos como UPyD, y mandar al PP y PSOE al ostracismo más absoluto. Ellos, por su inacción, por el sillón, por las jubilaciones millonarias, por el dedo que apunta quien ha de acceder a determinado puesto, por el tres o el seis por ciento de cientos de obras públicas, por su sed de poder, por todo eso y más, ellos  son los verdaderos culpables de lo que estamos padeciendo los españoles.

Así que señores, puestos a desatontuciar empecemos por nosotros mismos, esto no es el Barsa Madrid, o el Betis Sevilla, no, esto es otra cosa, esto es la bolsa o la vida.

By; Luis Ángel Jul López.